Descripción

Café silvestre proveniente de la finca regentada por la reconocida cafetalera etíope Yenesh Humband, en el área de Wegida, en la región de Yirgacheffe, Etiopía.

Se trata de un ejemplo de café etíope, cuya singularidad reside en la inexistencia de modificación genética. De hecho, oficialmente se reconocen 37 variedades etíopes que se asocian a las zonas en las que crecen, aunque se estima que puede haber «miles de variedades sin explorar» por el país del que procede el café.

Yenesh Hunband, por su parte, es una figura emblemática en la comunidad cafetalera de Idido, Yirgacheffe, que ha continuado la tradición familiar al heredar y administrar la granja de su familia. Como mujer soltera, Yenesh ha asumido la responsabilidad completa de la granja y ha iniciado nuevas vías de explotación por trabajar directamente con Ephtah, un movimiento que le garantizó un precio más justo por su café en comparación con los lavaderos locales. Yenesh Hunband es miembro activa del plan de diversificación de ingresos Ama Commitment, un programa que refleja su compromiso con prácticas de agricultura sostenible y el bienestar de su comunidad. La granja de Yenesh se destaca por su cultivo orgánico de café bajo la sombra de falsos plátanos, una técnica que favorece la calidad del café y mantiene el equilibrio ecológico. Aunque el café es orgánico, la falta de certificación oficial se debe al alto costo que esto implica para pequeños productores como ella.

En la granja de Yenesh, el café se recolecta a mano por trabajadores temporeros, respetando los ciclos naturales y asegurando la calidad de cada grano. Cuenta con un equipo de 25 personas en temporada de cosecha y 2 empleados permanentes. Después de la cosecha, el café se almacena en Moplaco, Gerji, en Addis Abeba, antes de ser enviado a Yibuti por tren para su distribución final.

Este café, procesado en origen, es enviado a León para ser tostado por San Agustín.